Cómo lograr el éxito en la fabricación mediante la sinergia entre planificación y programación
Postado por Stephen Dombroski, director de Mercados de Consumo y Alimentos y Bebidas en QAD Inc. em 13/05/2025 em ArtículoEl mantra de las empresas manufactureras es entregar los productos correctos en el lugar correcto, en el momento correcto y en las cantidades correctas.
Stephen Dombroski, director de Mercados de Consumo y Alimentos y Bebidas en QAD Inc. Foto: cortesía. Portal ERP LATAM.
Pero para hacer esto de manera repetida y exitosa se requiere la capacidad de comprender la diferencia fundamental entre la planificación de la producción y la programación de la producción. Esta diferenciación se vuelve aún más crucial cuando se aprovechan herramientas avanzadas para la planificación y la programación detallada de la producción.
Hoy en día estas herramientas permiten a las empresas fabricantes optimizar sus operaciones, minimizar los costos y mejorar el servicio al cliente.
La distinción entre planificación y programación de la producción
La planificación y la programación de la producción son dos términos que se han utilizado como sinónimos durante años, pero que a menudo se utilizan de forma incorrecta o incluso se transponen. Desde la perspectiva de un puesto de trabajo funcional, un organizador puede tener planificadores y programadores de producción.
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En ocasiones, ambos roles (dependiendo del tamaño de la empresa, los productos y otros factores) pueden combinarse y ser desempeñados por una sola persona. Así que, para empezar, diferencie los términos correctamente.
- La planificación de la producción responde a las preguntas fundamentales de qué producir, dónde producir y en qué intervalo periódico. Se centra en alinear la capacidad de producción con las previsiones de demanda, garantizando que los recursos se asignen de manera eficiente para satisfacer las necesidades futuras.
- Por el contrario, la programación de la producción se centra en los detalles operativos, determinando cómo producir, qué línea de producción utilizar y el momento exacto durante los turnos. Se centra en la secuenciación de productos similares para minimizar los cambios, mejorando así la eficiencia operativa.
Comprender esta distinción es fundamental para las empresas fabricantes que buscan lograr una producción justo a tiempo (JIT) mientras minimizan los costos de mantenimiento de inventario y maximizan el servicio al cliente.
El papel de una herramienta para la planificación de la producción
Debe ofrecer un marco sólido para la planificación de la producción al abordar las cuestiones de alto nivel de la producción, garantizando que las empresas tengan un plan coherente que se ajuste a sus previsiones de capacidad y demanda.
Para las empresas que fabrican contra stock, esta herramienta debe ayudar a planificar en función de la demanda prevista, lo que garantiza que los niveles de inventario se optimicen para satisfacer las necesidades de los clientes sin producir en exceso.
Para las empresas que fabrican bajo pedido, debe ser capaz de alinear los pedidos a corto y largo plazo en todos los recursos de capacidad de producción. Esto garantiza que las instalaciones de producción puedan gestionar de manera eficaz las demandas actuales y futuras, reduciendo los plazos de entrega y mejorando la capacidad de respuesta a los pedidos de los clientes.
La regla de oro en la gestión de la producción es que no se puede planificar la producción a partir de un mal plan. Esto pone de relieve la importancia de un plan de producción bien estructurado que sirva de base para una programación eficaz.
Herramienta para la programación avanzada: convertir los planes en acciones
Una vez que se ha establecido un plan de producción sólido, se necesita una herramienta que garantice una ejecución eficaz. Esta herramienta se centra en los detalles más finos de la producción y responde a la pregunta “¿cómo?” sobre la fabricación. Determina la línea de producción específica, el tiempo exacto durante los turnos y ordena los productos para minimizar los cambios.
Al combinar herramientas similares, reduce el tiempo y los costos asociados con los cambios. Esto no solo aumenta la eficiencia de la línea (OEE), sino que también garantiza que los cronogramas de producción sean realistas y ejecutables. El resultado es un entorno de producción que opera cerca de los principios JIT, lo que reduce los costos de mantenimiento de inventario y mejora la satisfacción del cliente.
Un beneficio adicional es la capacidad de evaluar este cronograma en función de la disponibilidad de material, ya sean ingredientes comprados, materiales, suministros, etc.
Repensando la gestión de la producción
Muchas empresas operan bajo la idea errónea de que una programación eficaz puede compensar una planificación deficiente. Sin embargo, la realidad es que, sin un plan de producción sólido, incluso las mejores herramientas de programación tendrán dificultades para ofrecer resultados óptimos.
Al adoptar un software para la planificación de la producción y que también cuente con la programación detallada, las empresas fabricantes pueden librarse de este concepto erróneo. Este tipo de herramientas proporcionan una solución integral que aborda tanto los aspectos estratégicos como los operativos de la gestión de la producción, lo que garantiza que los recursos se utilicen de manera eficiente y que las demandas de los clientes se satisfagan con prontitud.
La sinergia entre la planificación y programación de la producción
Comprender la distinción fundamental entre la planificación de la producción y la programación de la producción es fundamental para crear una plataforma de optimización de la fabricación sólida. Al establecer un plan de producción sólido y luego crear un programa de producción óptimo, las empresas fabricantes pueden evitar el esfuerzo inútil de intentar programar una salida a un plan defectuoso, una tarea que es simplemente imposible.
Este enfoque cohesivo permite a las empresas fabricantes optimizar las operaciones, reducir los costos y mejorar el servicio al cliente al garantizar que los productos correctos se entreguen en el lugar correcto en el momento correcto, en la cantidad y secuencia correctas, al mismo tiempo que se minimizan los cambios y los costos de mantenimiento de inventario. Esta sinergia permite optimizar personas, procesos y sistemas para que las empresas sean más ágiles, eficientes y resilientes, convirtiéndose así en organizaciones efectivas y adaptables.