Ciberseguridad estrategias para afrontar las amenazas del entorno digital

Las organizaciones de todos los tamaños están expuestas a amenazas digitales que se transforman de manera constante.

Foto: cortesía LinkedIn Moisés Morales. Portal ERP LATAM.

Contar con estrategias y herramientas para hacer frente a estos riesgos se ha convertido en una necesidad para cualquier organización. 

En un mundo interconectado, la seguridad cibernética ha dejado de ser un tema exclusivo de los departamentos de TI, convirtiéndose en una prioridad estratégica para las organizaciones de todos los sectores. A medida que la tecnología avanza, también lo hacen las amenazas, y las empresas se enfrentan al desafío de proteger no sólo sus datos, sino también su reputación y la confianza de sus clientes.

Aunque muchas organizaciones reconocen la necesidad de fortalecer sus defensas cibernéticas, la realidad es que solo un porcentaje relativamente pequeño se siente verdaderamente preparado para enfrentar un ciberataque significativo. Con una creciente dependencia en la tecnología y la digitalización, las empresas deben adoptar un enfoque proactivo en ciberseguridad, donde la prevención y la anticipación de amenazas juegan un papel clave.

Las perspectivas a futuro hacen que cada día sea más importante prepararse para un posible ataque cibernético. Un informe de Cybersecurity Ventures citado por la Organización de los Estados Americanos (OEA) destaca que para el año 2031 cada dos segundos se materializará un ataque de ransomware contra un negocio, consumidor o dispositivo.

Prevención, una constante en las organizaciones

Las tendencias globales indican un aumento del hacktivismo disruptivo, la injerencia electoral, y ataques más selectivos que explotan la inteligencia artificial (IA) para engañar a los usuarios y abrir nuevas vías para la ciberdelincuencia. Frente a este panorama, las empresas están buscando soluciones robustas que no solo reaccionan ante amenazas, sino que también las previenen de manera proactiva.

" La ciberseguridad es ahora una prioridad estratégica para todas las empresas, pero la velocidad a la que evolucionan las amenazas requiere un enfoque proactivo y dinámico. Implementar tecnologías avanzadas no es suficiente; es fundamental que estas soluciones se integren de manera que apoyen y protejan el trabajo diario de los usuarios, anticipándose a los riesgos antes de que se materialicen ”, asegura Moisés Morales, Asesor regional de soluciones de ciberseguridad en SAP.

Actualmente existen herramientas para una prevención proactiva que integran aplicaciones inteligentes, proporcionando una base sólida para la adopción de la Inteligencia Artificial Generativa (GenAI). Esto no solo permite a las empresas reaccionar rápidamente ante amenazas cibernéticas, sino que también les ofrece la capacidad de prevenirlas activamente, identificando y mitigando comportamientos de riesgo en tiempo real.

Por otro lado, están en marcha algunas otras soluciones que ofrecen a las empresas un control exhaustivo sobre las autorizaciones de acceso a través de la nube y la gestión centralizada de identidades, respectivamente. Estas herramientas son fundamentales para garantizar la protección de datos, la seguridad cibernética y la resiliencia operativa en un entorno cada vez más digitalizado.

El futuro de la ciberseguridad y la IA

Las predicciones en el campo de la ciberseguridad señalan que la GenAI jugará un papel decisivo en la protección de las empresas. Se estima que para 2026, las organizaciones que implementan GenAI en programas de cultura y comportamiento de seguridad experimentarán hasta un 40% menos de incidentes de ciberseguridad causados ??por errores humanos, que actualmente representan el 14% del total de incidentes.

Para SAP, es esencial que las empresas no solo adopten tecnologías avanzadas, sino que también desarrollen el talento necesario para gestionar la ciberseguridad de manera efectiva. La colaboración entre los departamentos de TI y recursos humanos es crucial para identificar y formar profesionales capacitados, capaces de enfrentar las amenazas actuales y futuras.

En América Latina, donde la ciberseguridad aún no es una prioridad estratégica para muchas empresas, es imprescindible fomentar políticas que promuevan la inversión, la innovación y la investigación en este sector. Además, la colaboración y el intercambio de información entre organizaciones se perfilan como pilares fundamentales para fortalecer la ciberseguridad a nivel regional e internacional.

Se estima que el costo anual de los ciberataques en América Latina y el Caribe podría superar los $90 millones en 2025, con un promedio de más de 18,5 millones de ataques al año, de acuerdo con cifras del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) , organización que señala además que “ solo siete de los 32 países latinoamericanos tienen planes para proteger su infraestructura crítica de ataques cibernéticos, y solo 20 cuentan con Equipos de Respuesta a Incidentes de Seguridad Cibernética ”.

En la era digital actual, en la que las amenazas cibernéticas no conocen fronteras, la colaboración global y la adopción de estándares internacionales son medidas más necesarias que nunca.